El presidente Danilo Medina decidirá pronto su posición en torno a la reelección presidencial, la que dijo será adoptada con el tiempo suficiente para que el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) pueda seleccionar su candidato presidencial y establecer el calendario electoral.
En una entrevista concedida a periodistas dominicanos en Panamá, el mandatario se refirió al tema que centra la reunión que habrá de celebrar el domingo 19 de este mes el comité político, donde habrá de conocer el tema relacionado con las elecciones del 2016.
Los periodistas preguntaron al gobernante si estaba en sus planes gobernar un nuevo periodo, a lo que respondió que “no estoy para entorpecer la carrera de nadie. “No estoy para entorpecer la carrera de nadie». Mire, yo creo que el mayor honor que puede recibir un ciudadano es ser electo por su pueblo para ser Presidente de la República, tiempo más o tiempo menos, eso no tiene importancia”.
El mandatario habló del significado que tienen para él las visitas sorpresas a comunidades que no tiene la oportunidad de visitarlo al Palacio Nacional. ““Usted no sabe lo que significa para mí, mis visitas de los domingos. Cuando yo estoy hablando con la gente indefensa, la gente vulnerable, la gente que no tiene quién hable por ellos, la gente que no tiene un amigo que lo lleve a hablar con un funcionario y mucho menos con el Presidente de la República. Yo tengo la oportunidad de juntarme con cientos de esa gente todos los fines de semana, y solucionarles problemas, que les van a resolver situaciones de vida, esas son las cosas importantes que tiene esto”, adujo.
Luego habló de los retos que significa gobernar: “Esto es sumamente difícil y complicado, y yo no se lo recomiendo a nadie. Hay gente que le gusta eso, de ser, ser, ser (sic), estar en el centro de todo, pero esto no es fácil. Tal vez cogerlo con la filosofía que yo lo tomo, de no enfrentar cada problema que se presente en el día a día en términos públicos, de no estar confrontando con el que emite una opinión. Yo respeto a todo el mundo”.
En cuanto a sus relaciones con el ex presidente Leonel Fernández, abundó poco, pero dijo que ambos son amigos.
Otro tema tratado fue el de la dermatitis que lo afecta. Medina también explicó en detalle los orígenes de la dermatitis que enrojece su rostro, de la que se observa notablemente recuperado, y sobre la que se han tejido toda suerte de especulaciones. Negó que esté enfermo y dijo que los médicos le han explicado que la irritación no es más que una reacción a un químico que absorbió su cuerpo durante un largo tiempo por el uso excesivo de un filtro solar durante la pasada campaña electoral que le “quemó” la cara.
También fue preguntado sobre la controversial sentencia que envuelve a su compañero de partido, senador por San Juan de la Maguana, Félix Bautista. Medina expresó que en República Dominicana existe la separación de poderes y que su responsabilidad es únicamente con el Poder Ejecutivo, desde donde asegura, se hace un gran esfuerzo por la transparencia en el uso de los recursos públicos.
En ese sentido agregó que no es función suya inmiscuirse en las responsabilidades que tocan a otros y que debe ser la sociedad la que haga su valoración al respecto, “que cada quien responda a lo que le puedan decir”.
“Nosotros estamos comprometidos con un gobierno transparente, en el que las cosas se hagan según las reglas y que no se afecten los intereses de nadie, dándole la oportunidad a todo el que quiera competir de manera igualitaria, pero ya meterme en la controversia de lo que está pasando en el país, no me corresponde, por muchas razones”, añadió.
En cuanto a su estilo de no hablar sobre temas en debates, dijo que lo hace por estar consciente de que cada palabra que emite un presidente tiene un gran impacto en la sociedad “y a veces el silencio me resuelve un problema más fácil que cuando yo hablo”.
También abordó el tema haitiano y reveló que durante una reunión con el secretario de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, explicó que el país no está en condiciones de otorgar automáticamente la nacionalidad a los más de 200 mil extranjeros, especialmente haitianos, que nacieron en el país y que no tienen documentos, ya que tendría que hacer lo mismo con el otro grupo de 800 mil que reside en territorio dominicano.
“Si 200 mil tienen el derecho a conseguir su documentación, que se le entregue la nacionalidad sin que tengan que hacer ningunas demostraciones de que han nacido aquí, entonces los 800 mil lo van a hacer. Entonces yo le dije:
«Ustedes me están pidiendo que le dé nacionalidad a un millón de personas, y un país pobre no puede con dos pueblos pobres. Yo siento que lo entendieron”.